Alejandra ?. M.
2/5
Gran falta de personal. Una sola persona para atender TODOS los servicios del hotel a excepción del desayuno. Llegas a recepción y es posible que no se encuentre y tengas que llamar a un teléfono que te indican ya que como he comentado, tiene que encargarse tanto de la recepción, como de la zona de la piscina (en la cual no hay socorrista), y de la “cafetería”. Cuando llegamos a la piscina tampoco había toallas y tuvimos que esperar a que las repusieran. Por no hablar de las sombrillas, que casi se me cae una encima, pero por suerte pude apartarme a tiempo.
Nuestra mayor decepción fue que al llegar un domingo nos dijeron que no había ningún tipo de servicio de restauración, y el lunes tampoco. Un hotel de cuatro estrellas a precio de lujo en el cual no tienes nada para comer y si quieres algo de bebida también tienes que esperar a que pase la única trabajadora que hay o llamarla. Le doy dos estrellas, por la atención recibida por su parte, ya que como digo, es la única que está ahí las 24 horas y entiendo que no es su culpa ni mucho menos, sino del hotel. Si piensas alojarte en el hotel un domingo o un lunes tienes que tener en cuenta que para comer o cenar necesitarás desplazarte al menos 20 minutos en coche y dedicarte a buscar algún sitio abierto especialmente en la cena, ya que la mayoría de la zona no lo están.
Por otra parte, en cuanto al desayuno, en nuestro caso, que fuimos un día a las nueve y media (el desayuno es hasta las diez y media) si se acaba algo no esperes que lo repongan. Fuimos testigos de cómo se acabó la tortilla y el embutido entre otras cosas y no se repuso. Si quieres algún tipo de leche que no sea bebida vegetal o bien de una máquina de cafés con café aguado, tienes que solicitarlo. Si esperas poder pedir unos huevos fritos, tampoco te los hacen, tienes que comerte lo que queda del revuelto frío que les queda. La cantidad de fruta también muy justa y alguna pasada, si les pides algo tan simple como un kiwi tampoco tienen. El principal problema aquí bajo mi punto de vista ya no es el producto que en general no está mal (aunque lo esperaba mejor de un hotel de estas características) sino que si se termina no hay más, por lo que el que llegue a las diez como muchas personas que vimos, se queda sin las cosas más básicas.
El servicio de minibar, ya que servicio de habitaciones no hay (ni un triste sándwich te pueden ofrecer en un hotel 4 estrellas), bastante malo, unas pocas bebidas, unas patatas de bolsa y un kit kat a un precio de 3,50€. Esperaba al menos algo más de variedad teniendo en cuenta que no tienes NADA para comer durante todo el día.
Los jardines muy abandonados, una pena que un sitio tan bonito esté en estas condiciones. Agua sucia… mal olor, en fin, nada que ver con las fotos idílicas del pazo.
En resumen, un hotel que no recomendaría, al menos si pretendes alojarte domingo/lunes. Calidad/precio fatal. El problema de falta de personal es grave.