Marta L. P.
5/5
Estancia muy agradable en un entorno precioso
Las casas de Tabla Honda nos han sorprendido gratamente. Son muy monas y están bien equipadas. Cada cabaña tiene dos plantas: arriba hay un aseo pequeño y cuatro camas y abajo un salón, dos habitaciones y un baño completo. Hay lavadora, cafetera, tostadora e incluso cerillas para la barbacoa.
El entorno es una maravilla: césped cuidado, árboles altos que dan buena sombra, y zona exterior con mesas y sillas para comer o descansar al aire libre. Los coches quedan protegidos bajo sombra. Es un sitio ideal para niños, pero nosotros fuimos seis adultos y estuvimos muy a gusto. Luego las cuatro casas que hay están bastante retiradas entre sí por lo cual en sonido no nos molestamos ni nada.
El sonido de los árboles y los pájaros es una delicia. Además, las casas tienen aire acondicionado, lo que se agradece en verano. No tienen chimenea, pero no la echamos en falta. El aire acondicionado tiene bomba de calor.
En cuanto a detalles a mejorar: el plato de ducha podría revisarse porque las puertas no cierran bien, y se agradecerían colgadores en la habitación de arriba, o alguna silla. También algún pie de esos que se ponen las maletas arriba y no se quedan en el suelo.
El pueblo de El Robledo es pequeño, muy tranquilo, y con un paseo precioso a orillas del río Bullaque. El paseo a lo largo del río merece la pena.
Cerca hay una empresa de actividades en la naturaleza que organiza rutas o experiencias, lo cual es un plus. Es cierto que está como en una esquina del parque, del corazón del Parque Nacional de Cabañeros, por lo que las distancias dentro del parque son largas, también porque es un parque bastante grande la verdad qué de extremo extremo son más de 2 horas en coche, pero el entorno merece mucho la pena. Hemos hecho rutas muy bonitas y desde las casas de madera pues te pueden informar de las rutas y de todo!!!
Muy recomendable para familias, pero también perfecto para grupos que busquen tranquilidad en plena naturaleza.
